En el corazón de la región de Terres dels Alforins, Clos de Lôm ha dado vida a un vino blanco que destaca por su originalidad y excelencia: el Clos de Lôm Malvasía.
Este vino ha conquistado tanto a la crítica especializada como al sector vitivinícola español, posicionándose como una de las referencias imprescindibles. Pero ¿Qué hace tan especial a este vino y por qué es una elección ideal incluso en los meses fríos?
La malvasía: una uva cargada de historia y versatilidad
Originaria de la antigua Grecia, la malvasía es una variedad que ha sabido adaptarse a una amplia diversidad de climas y suelos, convirtiéndose en una de las uvas más emblemáticas del Mediterráneo. Su nombre está vinculado al puerto de Monemvasia, un importante centro comercial del Imperio Bizantino. En su recorrido por Europa durante la Edad Media, esta uva se ganó un lugar privilegiado en la elaboración de vinos dulces, secos y espumosos.
En España, la malvasía ha encontrado en las regiones mediterráneas unas condiciones ideales de cultivo: suelos calcáreos y abundante sol que resaltan su frescura y carácter aromático. En las manos de Clos de Lôm, esta variedad cobra nueva vida, desafiando las expectativas tradicionales de un vino blanco y ofreciendo una experiencia única que se disfruta más allá de las estaciones.
El encanto distintivo de Clos de Lôm Malvasía
Lo que realmente distingue al Clos de Lôm Malvasía es la atención al detalle y el enfoque artesanal que caracteriza todo su proceso de elaboración. El viaje comienza con una doble vendimia: una primera cosecha temprana para capturar la frescura y acidez natural de la uva, seguida de una segunda recolección en su punto óptimo de maduración, lo que aporta riqueza aromática y un mayor cuerpo al vino. Este equilibrio entre juventud y madurez define su esencia.
El proceso de vinificación emplea exclusivamente el mosto flor, el jugo más puro extraído sin presión excesiva de las uvas. La fermentación, realizada a baja temperatura durante tres semanas, preserva los delicados aromas florales y frutales característicos de la malvasía. Posteriormente, el vino se somete a una crianza sobre lías finas durante seis meses, un paso clave que le aporta textura, complejidad y profundidad.
El resultado es un vino que despliega notas de flores blancas, frutas de hueso como el albaricoque, y un delicado toque mineral. Su final es largo, elegante y lleno de matices.
Un vino blanco para todas las estaciones
Aunque los vinos blancos suelen asociarse con el calor del verano, Clos de Lôm Malvasía rompe este esquema. Su estructura bien definida y la crianza sobre lías finas le confieren una complejidad y calidez que lo hacen ideal para acompañar platos de invierno. Es un excelente maridaje para cremas, pescados grasos al horno o incluso carnes blancas con salsas suaves.
La tradición mediterránea reinterpretada
Clos de Lôm Malvasía es mucho más que un vino; es una declaración de intenciones. Combina la rica herencia vinícola de Valencia con una visión moderna que prioriza la sostenibilidad y el respeto por la naturaleza. Cada copa captura la esencia del Mediterráneo, ofreciendo una experiencia sensorial que trasciende lo cotidiano y convierte cada momento en algo especial.
Este vino no solo celebra el pasado, sino que también apunta al futuro, demostrando que la tradición y la innovación pueden coexistir armoniosamente para crear algo realmente extraordinario. Una elección versátil y cautivadora, perfecta para cualquier ocasión y época del año.